Thursday, February 21, 2008

Dejaré de existir...

25 Diciembre '07

Necesito que esto pare, necesito ponerle fin a este dolor. Es preciso que nos perdonemos los unos a los otros. Mi vida depende de que un amigo perdone a otro, un hermano abrace a su hermana y que una hija pueda presentarle a su abuelo, su nieta.

¿Por qué vivimos rodeados de estos sentimientos? Si decimos que buscamos la felicidad ¿por qué dejamos que nuestras vidas se inunden de rencor, insultos y resentimientos?

Hoy no quiero ver más llanto, hoy no quiero oir más gritos, hoy clamo por el perdón de mis hermanos a los suyos, de los hijos a los padres y de los padres a sus hijos.

Deseo que construyamos un mundo distinto pues, ya este no lo tolero. Tanto mal en el ambiente me llena de dolor y lágrimas. Es crítico para mi supervivencia que cambiemos este mundo, que aprendamos a tenernos compasión; que tengamos tolerancia y que podamos vernos a los ojos con confianza.

En este momento, este hijo del mundo está llorando. Las lágrimas corren por sus mejillas pidiéndole al mundo que detenga este dolor. Sus hombros le pesan, sus oídos no quieren escuchar, sus ojos ya no ven y sus brazos le arden pues están llenos de llagas de tanto aferrarse al sueño de un mundo de Amor que nunca llegó.

Hoy le ruego al mundo de rodillas que deje caer las armas y que se llene de valor para perdonar. Que se rinda ante el amor y que deje de luchar.

Hoy le pido al mundo con las manos ensangrentadas, que tenga tolerancia pero, más allá, que tenga compasión. Que vea al rostro a sus hermanos y entienda que sufren como ellos. Que sienta el dolor en su espalda producto de esta guerra sin sentido y que comprenda que el alivio no está en la distancia y el rencor, sino en el perdón y en el Amor.
Suplico que cambiemos, imploro que nos detengamos y que le demos vuelta a nuestras vidas y abramos nuestros corazones, por que ya no puedo manejar tanto dolor y resentimiento, tanta palabra cruel, tanto odio y rencor. Por que un día más así terminará por apagar la llama de la esperanza en mí y sin ella, sin ese apoyo, sin mi bastón… dejaré de existir.
Rodolfo Carrillo M.

1 comment:

Anonymous said...

Bueno, primero gracias por ponerle fin a la espera de muchos fans que tienes pendientes a leer tus escritos. Y como es costumbre muchos compartimos tus sentimientos y dolores del alma. O por lo menos ese anhelo de cambiar el mundo, dejar tanta cosa negativa y volver a esos sentimientos de paz, armonía, amor y comprensión que teníamos cuando éramos pequeños. Que creíamos fielmente que todo se arreglaba con un abrazo, con compartir una galleta a la hora de la merienda, con respetar el turno, con ayudar y dar más de lo que teníamos.
El punto creo, es recordar esas acciones que hacíamos sin pensar, de una manera automática y aplicarlas en nuestras vidas de adultos. Es un poco difícil ya que nos encontramos constantemente con personas muy diferentes y con actitudes que quizás no comprendamos, pero la clave es aprender a respetar al genuino otro y tratar de cambiar nuestro mundo. Hay momentos y situaciones complicadas y difíciles pero no imposibles. En fin, GRACIAS!!!!
Laurie